Los precios del café continúan aumentando a niveles récord debido a toda una combinación de circunstancias: inflación en los mercados, inclemencias meteorológicas exacerbadas por el cambio climático y escasez de suministros.
Bloomberg, la agencia especializada en economía, reportó que a inicios de esta semana el aromático subió hasta en 4,8 % para alcanzar su nivel más alto desde 2011.
Según la publicación, el valor del café se ha elevado aproximadamente en 40 % este año,
Pero hay otras cifras: una publicación del periódico local Diario El Mundo indica que “el precio internacional del café ha aumentado un 62.2 % en el último año tras superar la barrera de los $260, un hito no visto desde 2011”.
Caso El Salvador
El Salvador se ha destacado como productor de café de exportación, pero la Asociación Salvadoreña de Beneficiadores y Exportadores de Café (ABECAFE) reportó en abril una baja de 105,163.47 quintales de café (16.2%) para el ciclo cafetero 2023-2024. Según la entidad, la contracción está relacionada con el cambio climático.
Reportes locales del Instituto Salvadoreño del Café (ISC) señalan que el “aumento moderado” de los precios es impulsado por la apreciación del real brasileño tras alcanzar su nivel más alto en tres semanas frente al dólar estadounidense.
Añadió que “esa fortaleza de la moneda desalentó las ventas de exportación de café desde Brasil, reduciendo la oferta global”.
Los ingresos por exportaciones de café de El Salvador entre enero y mayo fueron de $61.2 millones, registrando una disminución de $24 millones (28.2%), si se compara con la cifra alcanzada en el mismo lapso de 2023, de acuerdo con los datos del Banco Central de Reserva (BCR).
La entidad financiera reportó que las exportaciones de café (incluso tostado o descafeinado; cáscara y cascarilla de café; sucedáneos del café que contengan café en cualquier proporción) sumaron $18.9 millones solo en mayo, con un total de 80,900 quintales exportados.
Factores que impulsan el alza de precios
Fuentes especializadas en el rubro indican que el repunte internacional de los precios está siendo impulsado por la situación en Brasil, cuyas perspectivas de producción se ven truncadas por la peor sequía en décadas,
En todo caso, lo que pase en el país sudamericano siempre tendrá un efecto, puesto que es el principal productor general de café y en particular del tipo arábica, muy utilizado en la producción de café soluble.
A comienzos de septiembre, el Centro Nacional de Monitoreo y Alertas de Desastres Naturales (Cemaden), de Brasil, informó que algunos municipios de Minas Gerais, principal estado productor de Brasil, llevan alrededor de 150 días sin lluvias y eso podría arruinar la cosecha 2024-25.
Pero también, los expertos culpan de los altos precios a una combinación de elementos: los problemas de cultivos, las fuerzas del mercado, existencias agotadas y otros.
Es un ciclo de mala racha de más de tres años que inició en 2021 cuando una helada diezmó los cultivos de café en Brasil, provocando escasez del grano.
Esta situación hizo que los compradores recurrieran a países como Vietnam, el principal productor de granos de Robusta, que se usan típicamente en mezclas instantáneas.
La mala racha siguió cuando los agricultores de esa zona se enfrentaron a la peor sequía de la región en casi una década. Por esa razón, el país ha obtenido cosechas más pequeñas en las últimas dos temporadas, indicó en julio el diario The Business Times.
El tercer productor del mundo es Colombia, país que ha intensificado las actividades del rubro. Sin embargo, en los primeros meses del año sufrió asimismo escasez de lluvias,
Por eso, un consultor especializado del sector que reside en Vietnam y citado por la cadena BBC, Will Frith, señala directamente al cambio climático como el responsable porque “ha estado afectando el desarrollo de las plantas de café”.
En el vaivén del mercado también influyen las tensiones geopolíticas en Medio Oriente, que amenaza el suministro de contenedores por la ruta marítima del mar Rojo.
Según la Organización Internacional del Café (OIC), el “clima económico mundial” es relativamente difícil por la “limitada disponibilidad de dinero barato” debido a los ajustes de las tasas de interés.