Mamíferos que pueden respirar por el trasero, palomas mensajeras que pueden guiar misiles y gusanos sobrios que superan en velocidad a los borrachos: estos son algunos de los extraños descubrimientos científicos que ganaron este año los Ig Nobel, la peculiar alternativa a los premios Nobel.
Los premios anuales “para logros que primero hacen reír a la gente, y luego la hacen pensar” se entregaron en una ruidosa ceremonia el jueves por la noche en el MIT, Estados Unidos.
Aquí están los 10 ganadores de la 34ª edición, celebrada un mes antes de los verdaderos premios Nobel.
Mal aliento
El premio de fisiología fue otorgado a investigadores japoneses y estadounidenses por descubrir que muchos mamíferos pueden respirar por el ano en situaciones de emergencia.
Se inspiraron en los peces locha, que son capaces de “respirar aire intestinal”, según su estudio de 2021.
Los investigadores también descubrieron que los ratones, los cerdos y las ratas pueden hacer lo mismo, lo que sugiere que los intestinos podrían reutilizarse como un “órgano respiratorio auxiliar”.
Incluso sugirieron que esta podría ser una forma de entregar oxígeno de emergencia a los pacientes cuando hay escasez de respiradores, como durante la pandemia de Covid.
Misiles de paloma mensajera
El premio Ig Nobel de la paz recayó en el fallecido psicólogo estadounidense BF Skinner, por colocar palomas entrenadas en la punta de los misiles para guiarlos durante la Segunda Guerra Mundial.
El Proyecto Pigeon fue cancelado en 1944 a pesar de una prueba aparentemente exitosa en un objetivo en Nueva Jersey.
“Llámalo una idea descabellada si quieres, pero es una en la que nunca he perdido la fe”, escribió Skinner en 1960.
Envidia de plantas de plástico
El premio de botánica se otorgó por una investigación que descubrió que algunas plantas reales imitan las formas de plantas de plástico cercanas.
El premiado Felipe Yamashita, de la Universidad de Bonn (Alemania), dijo que su hipótesis es que la planta de Boquila que estudiaron “tiene algún tipo de ojo que puede ver”.
“Cómo lo hacen, no tenemos idea”, dijo entre risas en la ceremonia.
“Necesito un trabajo”, añadió.
Apagar
El premio de probabilidad fue otorgado a los investigadores que lanzaron 350.757 monedas.
Inspirados por un mago, los investigadores descubrieron que el lado que estaba hacia arriba antes de ser dado vuelta ganaba alrededor del 50,8 por ciento de las veces.
Después de más de 81 días de trabajo volteando los muebles, el equipo tuvo que utilizar pistolas de masaje para aliviar los hombros doloridos.
El investigador principal, Frantisek Bartos, dijo a AFP que el equipo estaba entusiasmado por convertirse en premio Ig Nobel.
“Aunque se trata de un premio ‘parodia’, es muy agradable que se destaque tu investigación”, afirmó. “Y espero que divierta y tal vez incluso inspire a una nueva generación de científicos”.
La verdadera clave de la longevidad
El premio de demografía fue otorgado por un trabajo detectivesco que descubrió que muchas de las personas famosas por vivir más tiempo vivían en lugares con “pésimos registros de nacimientos y muertes”, según indicó el sitio web de Ig Nobel.
El investigador australiano Saul Justin Newman leyó un poema en la ceremonia que concluía que el verdadero camino hacia la longevidad es “mudarse a un lugar donde los certificados de nacimiento son raros, enseñar a los hijos el fraude pensional y empezar a mentir”.
Carrera de gusanos borrachos
El premio de química fue para un equipo que utilizó un análisis complejo llamado cromatografía para separar gusanos borrachos de sobrios.
Los investigadores demostraron el estudio recreando una carrera en el escenario entre un gusano sobrio que había sido teñido de rojo y un gusano azul que habían emborrachado.
El gusano sobrio ganó.
De este remolino
El premio de anatomía fue otorgado a un equipo de investigadores franceses y chilenos que descubrieron que los remolinos del cabello de la mayoría de las personas giran en el sentido de las agujas del reloj; sin embargo, en el hemisferio sur, los remolinos en el sentido contrario a las agujas del reloj son más comunes.
Hacer que los placebos duelan
El premio Ig Nobel de medicina fue otorgado a investigadores europeos que demostraron que los medicamentos falsos que provocan efectos secundarios dolorosos pueden funcionar mejor que los medicamentos falsos que no los tienen.
Peces muertos nadando
El premio de Física fue otorgado al científico estadounidense James Liao por “demostrar y explicar las capacidades de natación de una trucha muerta”.
“Descubrí que un pez vivo se mueve más que un pez muerto”, dijo Liao al aceptar el premio.
Gato asustado sobre una vaca
El premio de biología fue otorgado a los investigadores estadounidenses Fordyce Ely y William E. Petersen, fallecidos recientemente, por un experimento particularmente extraño realizado en 1941.
Explotaron una bolsa de papel junto a un gato que estaba parado sobre el lomo de una vaca, para “explorar cómo y cuándo las vacas arrojan su leche”.
