Volar puede ser una experiencia estresante para muchas personas, pero un nuevo estudio publicado el jueves concluye que los viajes aéreos comerciales son cada vez más seguros y el riesgo de muerte se reduce a la mitad cada década.
La tasa de mortalidad cayó a 1 por cada 13,7 millones de embarques de pasajeros a nivel mundial en el período 2018-2022, una mejora importante respecto de 1 por cada 7,9 millones de embarques en 2008-2017, según un artículo de investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
También está muy lejos de los albores de los viajes aéreos comerciales: las muertes por pasajero fueron de 1 por cada 350.000 embarques entre 1968 y 1977.
“La seguridad de la aviación continúa mejorando”, dijo el profesor del MIT Arnold Barnett, coautor de la investigación que apareció en el Journal of Air Transport Management, y agregó que la probabilidad de morir “continúa disminuyendo en un factor de dos cada década”.
Barnett comparó la tendencia con la “Ley de Moore”, la famosa predicción del fundador de Intel, Gordon Moore, de que la potencia informática de los chips se duplica aproximadamente cada 18 meses.
Entre 1978 y 1987, el riesgo de morir fue de 1 por cada 750.000 pasajeros que embarcaban; entre 1988 y 1997, de 1 por 1,3 millones; y entre 1998 y 2007, de 1 por 2,7 millones.
El último gran desastre aéreo comercial en Estados Unidos fue en 2009, cuando el vuelo 3407 de Colgan Air se estrelló y murieron 50 personas.
Sin embargo, Barnett advirtió que no está garantizado que se produzcan avances. Las recientes colisiones casi forzadas en pistas estadounidenses este año han sido noticia, mientras que los investigadores federales han estado presionando a Boeing para que explique por qué se desprendió un tapón de la puerta de un avión 737 MAX 9 en pleno vuelo en un avión de Alaskan Airlines en enero.
Las cifras principales también ocultan enormes disparidades globales en seguridad aérea: el estudio divide a los países en tres niveles según sus registros de seguridad.
En el grupo de los más ricos se encuentran Estados Unidos, países de la Unión Europea y otras naciones europeas, como Montenegro, Noruega, Suiza y el Reino Unido. Australia, Canadá, China, Israel, Japón y Nueva Zelanda completan este grupo.
El segundo nivel está formado por Bahréin, Bosnia, Brasil, Brunei, Chile, Hong Kong (contado por separado de China), India, Jordania, Kuwait, Malasia, México, Filipinas, Qatar, Singapur, Sudáfrica, Corea del Sur, Taiwán, Tailandia, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos.
El resto de los países del mundo se encuentran en el tercer nivel. Es alentador que, aunque el riesgo de morir es mucho mayor en estos países, las muertes por abordaje en vuelos también se redujeron aproximadamente a la mitad durante el período 2018-2022.