Un grupo de científicos comprobó que las gafas de realidad virtual pueden reducir el miedo y el dolor en los procesos de vacunación infantil. Los resultados de la investigación también muestran el aumento en la satisfacción de los padres con este procedimiento, de acuerdo con la publicación de los resultados en la revista Journal of Clinical Nursing.
La autora principal del estudio, Laura García Garcés, directora del departamento de Enfermería y Fisioterapia de la Universidad Cardenal Herrera, de España, dijo: “Diseñamos un ensayo clínico amplio, además de evaluar la percepción del dolor en niños durante la vacunación, también valoraremos si existe una disminución del miedo cuando la técnica de distracción utilizada es la realidad virtual”.
En el ensayo clínico realizado, las investigadoras evaluaron a 162 participantes en el Centro de Salud Tres Forques, antes Fuensanta, de Valencia. La mitad de los niños fueron asignados aleatoriamente al grupo de intervención, en el que se utilizó la distracción con realidad virtual inmersiva durante la vacunación, mientras que en el grupo control se utilizaron técnicas de distracción estándar. Se emplearon escalas validadas para evaluar el grado de dolor (Wong–Baker FACES) y el nivel de miedo (Children’s Fear Scale).
LOS PADRES ESTÁN SATISFECHOS
En comparación con el grupo de control, los niños que usaron las gafas de realidad virtual mientras les vacunaron refirieron significativamente menos dolor y miedo, mientras que la satisfacción de los padres fue significativamente mayor, al ver la eficacia de esta estrategia en los niños. Con respecto al dolor, este fue menor en los niños que usaron la realidad virtual que en el grupo control.
Respecto al miedo, este también fue significativamente menor cuando se usó la realidad virtual (cantidad media de 73.9 en el grupo de realidad virtual, frente a 88.9 en grupo control). El estudio también ha detectado que el dolor y el miedo declarados no difieren según el sexo del paciente. En cuanto a la edad del niño, esta no está relacionada con el miedo, pero sí con el dolor: cuanto más joven es el paciente, mayor ha sido el dolor que ha descrito.
La investigadora Laura García-Garcés destaca: “El ensayo clínico nos ha permitido confirmar que la realidad virtual inmersiva, que requiere una inversión muy pequeña, como son las gafas de realidad virtual, puede controlar eficazmente el dolor y el miedo en los niños durante la vacunación. La mejora de las experiencias de vacunación en los niños y también en los padres pueden contribuir a aumentar la adherencia al calendario vacunal y, con ello, la inmunidad de grupo en las enfermedades para las que contamos con vacunas efectivas para prevenir su transmisión”.
Newsweek en Español