Los salvadoreños se ven afectados por los altos precios de las verduras, las cuales subieron hasta en un 233% entre el 14 al 26 de junio, según apuntan los datos gubernamentales.
Las lluvias que azotaron a El Salvador a mediados de junio provocaron un aumento en los precios y no precisamente por algún tipo de desabastecimiento, según han informado comerciantes mayoristas y comprobado las autoridades durante supervisiones en puestos de venta.
Según el informe diario de precios de productos agropecuarios del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el ciento de pipián grande fue el que más se encareció en ese periodo, con $56 (233%) adicionales, al pasar de $24 a $80. El mediano subió 200% ($40), tras llegar a los $60. Vendedores de Santa Tecla aseguran que la unidad llegó a venderse en $1.
El güisquil fue otro de los que subió tras las lluvias. El saco de güisquil verde oscuro se cotizaba en $36.25 antes de las lluvias y se vendía en $62.50 hasta el viernes de la semana pasada, indican los datos del MAG. En el caso de la bolsa de 50 unidades de güisquil grande, el alza fue de $10.75 y de $10.50 en el mediano, en el mercado central de San Salvador.
El problema viene desde hace más de dos meses, puesto que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) elaborado por la Oficina Nacional de Estadísticas y Censos (ONEC), establece que el güisquil y la papa fueron los productos que más subieron de precio en El Salvador durante el mes de mayo pasado.
También se encareció el tomate y el chile verde.
Sin embargo, las reducciones más significativas en ese periodo se registraron en la cebolla, la naranja, el plátano, el limón y el huevo de gallina, establece la medición oficial.
Una publicación de un medio local determinó, tras una investigación, que mientras que, en Guatemala, país de origen del 80 % de las hortalizas que se consumen en nuestro país, los precios se han mantenido estables en casi todos los casos.
“El aumento de los precios en los mercados locales no se puede atribuir a un alza en el país vecino”, afirma el reporte periodístico.
De hecho, el fin de semana, los comerciantes del mercado de mayoreo La Tiendona, principal centro de distribución de San Salvador, aseguraron que no hay desabastecimiento y “se mantienen estables los precios”.
La representante de los comerciantes, Susana Sandoval, afirmó que los mayoristas “se han comprometido” a reducir los precios y son los minoristas quienes deben bajar los suyos.
Los vendedores en La Tiendona sostienen que ellos nada tienen que ver con los aumentos y que estos se deben a su precio en Guatemala e, incluso, a un incremento en los aranceles de entrada, pero los alimentos están exentos de esos cobros en El Salvador.
Otros, como la Cámara de productores agropecuarios (CAMPO) afirman que el problema radica en que “El Salvador se está convirtiendo en un país netamente importador en materia de alimentos, y eso tiene sus consecuencias. Esto da la oportunidad de que el comerciante, el importador o el vendedor, le traslade todo aumento de costos al consumidor final y que, incluso, especule”.
Inspección de precios
Por su parte, el gobierno inició a mediados de junio una serie de inspecciones en los centros de abasto con el propósito de evitar alzas en los precios de los alimentos por parte de algunos comerciantes que puedan especular basándose en un supuesto desabastecimiento provocado por las lluvias.
En las inspecciones participa personal de la Defensoría del Consumidor y del Ministerio de Agricultura, e incluye a los grandes mercados, supermercados, tiendas de mayoreo y otros establecimientos de venta de productos alimenticios.
La Defensoría del Consumidor (DC) ejecuta inspecciones en los municipios y distritos de La Unión Sur, La Unión; Santa Ana Este, en El Congo y Coatepeque; La Libertad Costa y San Salvador Centro. 🥦🫑🧅🥔🍐🍊🍉
Los proveedores de alimentos y productos esenciales de la canasta… pic.twitter.com/yGuRAHmxLQ
— Defensoría del Consumidor 🇸🇻 (@Defensoria_910) July 1, 2024
“Las condiciones de abastecimiento están siendo óptimas a nivel nacional. De igual manera, nuestras fronteras se encuentran con un libre flujo, no existe ningún tipo de obstaculización que pudiera generar condiciones de desabastecimiento en el mercado nacional”, dijo a los medios en esa oportunidad el presidente de la Defensoría del consumidor, Ricardo Salazar.