Los jugadores de fútbol podrán en adelante señalar al árbitro un gesto o una palabra de carácter racista realizando una X con las manos, anunció este viernes la FIFA, en el marco de su lucha contra las discriminaciones que ensucian el deporte.
La instancia rectora del fútbol mundial declaró que el racismo constituiría un delito específico en el código de disciplina del deporte, con sanciones “severas” que podrán ir hasta la pérdida de un partido.
Durante el congreso anual de los 211 miembros de la FIFA en Bangkok (Tailandia) se tomó “una postura mundial contra el racismo”, después de varios meses de consultas con jugadores que han sufrido abusos por parte de adversarios o aficionados.
La estrella del Real Madrid, Vinicius Jr, es una de las voces con más peso en haber denunciado el racismo en el fútbol.
A menudo objeto de insultos de ese tipo en los estadios españoles, el delantero brasileño de 23 años rompió en lágrimas recientemente al recordar en conferencia de prensa ese combate contra las discriminaciones. Un partido amistoso simbólico entre España y Brasil fue organizado a finales de marzo con ese objetivo.
Varios partidos de fútbol, especialmente en Europa, se vieron perturbados las últimas semanas por incidentes racistas en las gradas, que a menudo llevaron a los árbitros a interrumpirlos.
“Hay problemas en el fútbol”, reconoció en abril el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, haciendo un llamado a “estar unidos para combatir el racismo y la violencia”.