Con motivo del 25 aniversario de la icónica película Amores perros, de Alejandro González Iñárritu, el centro cultural LagoAlgo, ubicado en el corazón del Bosque de Chapultepec, en la Ciudad de México (CDMX), presentará una exposición cinematográfica multisensorial titulada “Sueño perro”. ¿De qué se trata?
La muestra reunirá material inédito y descartado originalmente para la cinta, estrenada el 16 de junio del año 2000, resguardado en los archivos de la Filmoteca de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“’Sueño perro‘ es una producción de Fondazione Prada, socio principal del proyecto. Esta experiencia se presenta como parte de las celebraciones por el 24 aniversario de ‘Amores perros ‘, filme emblemático nominado al Premio de la Academia”, informó LagoAlgo en su perfil de Instagram acompañada de una fotografía del cineasta mexicano, ganador de cuatro Óscares.
De acuerdo con la página oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), durante la revisión del material rescatado Iñárritu tuvo que revisar 300,000 milímetros de película, que equivale a 16 millones de fotogramas, “con el que ha creado una experiencia inmersiva compuesta de una narrativa visual no lineal en 35 milímetros y acompañada de una banda sonora creada especialmente para la instalación”.
Te puede gustar: ‘Los mexicanos tienen mucho que aprender de los zapatistas’
“Sueño perro” constará de tres sedes: la primera en Milán (abierta del 18 de septiembre al 26 de febrero de 2026), la exposición de LagoAlgo en la capital mexicana permanecerá del 5 de octubre al 4 de enero; mientras que en el LACMA, Los Ángeles, llegará durante la primavera del próximo año.
Ver esta publicación en Instagram
“AMORES PERROS” Y LA “TRILOGÍA DE LA MUERTE”
Esta es la tercera colaboración entre el cineasta y la Fondazine. Miuccia Prada, presidenta y directora, afirmó que con este proyecto quieren abrir nuevas perspectivas sobre el trabajo de Iñarritu que combina “la fuerza del realismo y la densidad del simbolismo”.
En contexto, Amores perros fue la ópera prima de Iñárritu como director de largometraje y marcó también el inicio de una colaboración destacada con el guionista Guillermo Arriaga. La cinta es considerada una obra clave del cine mexicano contemporáneo y fue un parteaguas en la proyección internacional del cine del país.
Entre los temas centrales de la historia destacan la violencia urbana, el abandono, la traición y el caos de la vida. La música, a cargo de Gustavo Santaolalla, jugó un papel importante en el tono emocional de la película. Fue la primera entrega de la llamada “trilogía de la muerte” de Iñárritu (seguida por 21 Gramos y Babel). N