Con una personalidad “particularmente atípica”, el antiguo cirujano Joël Le Scouarnec, de 74 años, pudo ocultar durante décadas sus parafilias, que llevaron a agredir sexualmente a unos 300 pacientes, en su mayoría niños. Ahora su juicio comenzará en Vannes, en el oeste de Francia, el próximo 24 de febrero y terminará en junio.
El macrojuicio contra Joël Le Scouarnec presenta algunas similitudes con otro proceso “fuera de lo común” que conmocionó al mundo: el de las violaciones en serie a Gisèle Pelicot.
La duración de su juicio es similar al de Dominique Pelicot y otros 50 acusados por violar a Gisèle, que se desarrolló del 2 de septiembre al 20 de diciembre de 2024. En ambos casos, la cuestión de la sumisión química y de las agresiones cuando la víctima o las víctimas estaban “inconscientes” están en el corazón de las discusiones.
En el caso de Joël Le Scouarnec, “se trata de un hombre que es un pervertido y un cirujano pediátrico”, por lo que las víctimas se encuentran “sedadas por la anestesia”, señala Cécile de Oliveira, abogada de víctimas.
“Si comparamos ambos casos, evidentemente, lo que tienen en común es la ausencia de consentimiento provocada por la sedación total de las víctimas”, señala la letrada.
Según Francesca Satta, otra de las abogadas de las víctimas del cirujano, estos casos son además “totalmente únicos”. “Por un lado, tenemos a una persona adulta que ha sido drogada por su marido. Por otro, estamos en un entorno hospitalario, con niños que sufrieron abusos cuando se despertaron o después”, agrega.
Otro punto en común es que los principales acusados dejaron rastros de los hechos: Pelicot registró en video las agresiones, mientras que Le Scouarnec las anotó en cuadernos, elementos claves de la investigación.
En el caso del cirujano, “tenemos escritos que son obra del acusado. Desde ese punto de vista, puede haber algunas similitudes, aunque siguen siendo casos diferentes”, apunta Thibaut Kurzawa, uno de los abogados defensores.
¿JOËL LE SCOUARNEC SERÁ UN NUEVO CASO MEDIÁTICO?
Con 264 periodistas acreditados, de 62 medios, y casi 300 víctimas, el nuevo juicio debería recibir una cobertura mediática similar al del caso de Gisèle Pelicot, que acabó convirtiéndose en un icono feminista mundial.
“Creo que tendrá una repercusión aún mayor, dado que Le Scouarnec es el primer pedófilo internacional que ha causado tantas víctimas”, según Francesca Satta.
Rodolphe Costantino, abogado de la asociación de protección de la infancia Enfance et Partage, tiene en cambio “la impresión de que no va a ser un tsunami mediático”.
En el caso Pelicot, “la atención se centró en la víctima, que además estaba sola. En este caso, la atención podría centrarse en el autor si realmente interesara, pero no estoy seguro”, explica Costantino.
Cécile de Oliveira resume la principal diferencia entre ambos casos: En el de Pelicot, “hay una sola víctima y unos 50 acusados. Aquí, la proporción es inversa: un solo acusado y 300 víctimas”.
¿QUIÉN ES JOËL LE SCOUARNEC?
Le Scouarnec nació en París de padre ebanista y madre conserje. El mayor de tres hermanos era un muy buen alumno, más bien solitario, que soñaba desde los 10 años en convertirse en cirujano, lo que logró en los años 1980.
Se casó y tuvo tres hijos entre 1980 y 1987. Pero bajo la imagen de una familia sin problemas, la relación del matrimonio fue cada vez más tensa a medida que aumentaban las tendencias pedófilas del médico.
“Joël está habitado por el diablo y no sospechaba nada”, dijo en 2019 al diario Le Télégramme su ahora exesposa, de la que se separó a inicios de los años 2000 y se divorció oficialmente en 2023.
Además, la mujer aseguró que “nunca” sospechó de él, incluso si lo sorprendió “mirando de forma rara” a jóvenes vecinos. En los diferentes hospitales del oeste de Francia en los que ejerció, la mayoría de sus excompañeros lo describen como un hombre “discreto” y un médico “competente”, que nunca despertó dudas, salvo para dos de ellos.
Le Scouarnec cambió de hospital en varias ocasiones por diversos motivos: conflictos con sus compañeros, oposición a la compra de una clínica por un grupo de “financieros”, cierre de su servicio, etcétera.
Fuera del hospital, se aislaba. En su domicilio coleccionaba decenas de muñecas, con las que practicaba actos sexuales, y tomaba fotos y videos de sus prácticas, también zoofílicas, escatofílicas y sadomasoquistas.
Según sus declaraciones, el acusado exploró “lo más sórdido y tenebroso” y se entregó “al mundo de la pedofilia“, creyéndose intocable. En sus cuadernos, descubiertos durante un allanamiento en 2017, registró y enumeró su vida sexual, donde afirmó estar “obsesionado, incluso tiranizado, por todo lo relacionado con el sexo”.
Los investigadores encontraron más de 50,000 fotos y 5,000 videos violentos. “Los expertos psiquiátricos y psicólogos permitieron esclarecer las diferentes tendencias de una personalidad particularmente atípica”, indicó la fiscalía a la prensa.
“SU TARJETA BANCARIA, QUE UTILIZABA PARA ACCEDER A SITIOS DE PORNOGRAFÍA INFANTIL, LO TRAICIONÓ”
La justicia lo descubrió en 2004. Su tarjeta bancaria, que utilizaba para acceder a sitios de pornografía infantil, lo traicionó y un tribunal de Vannes lo condenó en 2005 a cuatro meses de prisión, con suspensión de pena.
Esta condena no le impidió seguir con su carrera de cirujano hasta 2017, cuando se jubiló. Ese mismo año, cuando su vecina de seis años denunció una violación, el alcance del número de sus víctimas salió a la luz.
Además de cientos de pacientes, también agredió sexualmente a dos de sus sobrinas. Ante el tribunal de Saintes, en diciembre de 2020, era un anciano de pelo blanco, encorvado, sin mucho carisma, el que estaba en el banquillo de los acusados, según una periodista de la AFP que siguió el juicio.
Desde entonces, cumple una pena de 15 años de cárcel por haber violado a su vecina y a una sobrina en la década de 1990, y por abusos sexuales a otra sobrina y a una paciente menor de edad durante el mismo periodo.
Francesca Satta lo describe como “muy frío, muy distante”, además de calculador: “Solo avanza sus peones cuando sabe qué peones avanzamos”. Ahora también representará a las demás víctimas en el nuevo juicio programado para marzo. N
(Con información de AFP)