Este año celebramos el 50 aniversario de la madre de las carreras del desierto: la gran SCORE Baja 1000.
La competencia comenzó en Ensenada, Baja California cruzando por toda la península de Baja California hasta llegar a La Paz, Baja California Sur, con un total de 1,134 millas recorridas.
Hubo más de 300 entradas compitiendo profesionalmente en todas las categorías: desde UTVs, MX hasta los monstruosos Trophy Trucks.
150 pilotos de todo el mundo participaron en el certamen que duró del 12 al 18 de noviembre, con participantes originarios de 40 estados de los Estados Unidos y 30 países, incluyendo México.
La “Baja 1000” es la carrera en desierto más vieja y mejor conocida de todo el mundo desde 1967 y muchos profesionales la consideran como la más importante.
Esta carrera es quizás el mayor logro que un corredor puede alcanzar en este deporte. Es la más prestigiosa del mundo y no cualquiera puede dominar los terrenos de la Baja.
El primer recorrido marcado fue en 1962 por Dave Ekins y Bill Robertson Jr. en dos motocicletas Honda 250 con un tiempo de 39 horas y 54 minutos. En aquella época, la única manera de registrar los tiempos era por medio de telegrama. Los organizadores marcaban la hora de salida en Tijuana y al llegar a La Paz, volvían a marcar el tiempo.
“Sin la carrera SCORE Baja 1000, simplemente no habría ninguna carrera de desierto”, dice Roger Norman, CEO y presidente de SCORE International.
Hoy la famosa “Baja 1000” continúa despertando interés por todo el mundo e incluso segundas y terceras generaciones de corredores comparten su amor por el off road con familiares y amigos.
Después de 49 mil millas acumuladas en todas las carreras, este año se conmemoró a algunas de las leyendas de la Baja, como Rod Hall, Ron Bishop, Johnny Johnson y Larry Roeseler.
Rod Hall es el único corredor que ha logrado completar las 50 carreras SCORE Baja 1000, con un record de 24 victorias en su clase y una victoria general en 1972.
Este año Rod y su hijo Chad Hall añadieron una historia más a su legado en las carreras off road.
El primer equipo mexicano en ganar la SCORE Baja 1000 compuesto por padre e hijo fueron Gustavo Vildósola Sr y Gustavo “Tavo” Vildósola.
Los Vildósola ganaron en 2010 en la categoría Trophy Truck, siendo los primeros mexicanos en ganar la famosa carrera peninsular de Ensenada a La Paz.
A pesar de tanta oferta de carreras, la Baja sigue siendo el objetivo número uno para todos los amantes del todoterreno, tanto como corredores profesionales, semi-profesionales y espectadores.
Todos comparten algo en común: el amor a las carreras.
Este año tuve la oportunidad por primera vez de vivir la experiencia de la Baja. Desde la contingencia, hasta la meta: 1,000 millas al sur de Ensenada.
Al arrancar el viaje, percibo la emoción y adrenalina, y al llegar a Ensenada todo está listo para recibir a los más de 250 mil espectadores.
Desde días antes del comienzo de la carrera, se puede identificar la atracción por el certamen. Por las calles principales de la ciudad pasan vehículos que van a competir.
En el segundo día de la competencia, comienza la contingencia para los rockstars y demás clases. No solo es para demostrar los coches, si no que también es una fiesta que cada año se espera en la ciudad. Desde el comienzo a las 9:00 am y hasta el último vehículo, la gente permanece en el bulevar Costero disfrutando de los monstruosos vehículos escuchando música y divirtiéndose.
Y a la medianoche del jueves, la contingencia de la SCORE Baja 1000 sigue con las motocicletas y cuatrimotos.
Cada motocicleta sale en intervalos de dos minutos con cinco minutos de diferencia entre cada clase, y las cuatrimotos en intervalos de un minuto con cinco entre cada clase.
Llegó por fin el momento que con ansias estuve esperando durante un año. El 50 aniversario da comienzo a las 12:00 am con el corredor estadounidense 1x Mark Samuels 208, seguido por el corredor guatemalteco 2x Francisco Arredondo 218.
Al salir de Ensenada con destino a la milla 160 de la carrera todoterreno, en las carreteras de la ciudad se juega otra carrera, quizás la más importante: la de los Chase Trucks.
A los Trophy Trucks los siguen los pájaros de acero: helicópteros que los monitorean a lo largo de la competencia. FOTO: EMILIANO GARCÍA CORRAL
Estos vehículos son el pilar del equipo de los corredores ya que transportan toda la herramienta y refacciones necesarias para reparar los vehículos de la competencia.
Se les llama así, porque son los camiones que persiguen a los autos de los pilotos, por si requieren de su ayuda.
LosChase Trucks están preparados para todo. Desde cambiar una llanta, hasta reemplazar una transmisión completa. Son los verdaderos guerreros de la Baja, porque sin ellos ningún equipo podría lograrlo.
En la carretera hacia San Felipe con solo dos carriles puedes ver cómo los Chase Trucks cargados con llantas y combustible de carreras te rebasaban con el objetivo de llegar al check point o punto de control más cercano antes que su corredor.
El ambiente en la Baja es tenso porque no puede haber error. Son 36 horas continuas de carrera, de manejar hasta ver el amanecer a helados a 5 grados centígrados in poder descansar, o padecer el calor de los 100 grados Fahrenheit en medio de la nada.
Manejamos durante toda la noche, en tramos en los que la pista iba paralela a la carretera y por 6 millas continuas, podías circular a la par de los corredores a 100 millas por hora.
La gente acampa a lo largo de la pista. Se ven campamentos de más de 30 personas, y también campamentos de solo dos personas en medio del desierto.
En realidad el sacrificio de los espectadores es grande y es lo que le da vida a esta aventura. En lugar de pasar la noche en su hogar abrigados y cómodos, pasan la noche en el desierto junto a una fogata con su bolsa de dormir, o parados durante horas solo para ver pasar por cinco segundos a los corredores volando sobre el desierto.
A las 10:00 de la mañana del viernes los grandes salen al acecho.
Con hambre de victoria y sed de gloria, losTrophy Trucks pueden alcanzar velocidades de hasta 150 millas por hora en vados de hasta seis pies de profundidad.
A los Trophy Trucks los siguen los pájaros de acero: helicópteros que los monitorean a lo largo de la competencia.
Alrededor de las 4:00 de la tarde estábamos en la milla 180 de la carrera y los primeros Trophy Trucks llegaron. A lo lejos se aprecian las nubes de polvo que dejaban las poderosas máquinas de 850 caballos de fuerza y a unos metros de distancia se empezaban a escuchar los rugidos de esos poderosos 8 cilindros.
Apenas y lo veías pasar cuando la nube de polvo te envolvía dejándote a ciegas mientras se alejaban a toda velocidad.
La tranquilidad del desierto y el olor a combustible de carreras es inigualable para los amantes de las carreras.
Matías Arjona, es un joven de 18 años de Ensenada, Baja California que participó junto a su padre (Matías Arjona) en esta carrera de la SCORE Baja 1000.
Matías Arjona hijo es la cuarta generación de pilotos en su familia y este año logró colocarse en el tercer puesto en la categoría Clase 12.
Matías hijo dice que correr en la SCORE Baja 1000 es una experiencia muy gratificante ya que desde que tiene memoria se ha involucrado en las carreras junto con su papá.
El hijo empezó a la edad de 16 y este año es su primera Baja 1000 en competencia. El año pasado no llegó a la meta por problemas mecánicos.
Este año, solo Matías y su mecánico armaron el vehículo con el que corrieron, y con el apoyo de su padre, logró crear su equipo para esta carrera.
El ganador de este año fue el mexicano de Tecate, Baja California, Carlos Apdaly López en la categoríaTrophy Truck, celebrando el 50 aniversario con una victoria más y representando a su país.