Kim Jong Un supervisó personalmente el lanzamiento del misil balístico intercontinental Hwasong-15 ocurrido a inicios de esta semana, reportó el medio oficialista Rodong Sinmun que difundió una serie de imágenes en las que se ve sonriente al líder norcoreano.
Kim refirió, según la misma información, que este nuevo tipo de cohete puede dar la victoria final de Corea del Norte “en el enfrentamiento con los imperialistas estadounidenses”.
El Rodong asegura que Kim guió meticulosamente los procesos de prelanzamiento y emitió la orden para lanzar el cohete que alcanzó una altitud de 4.475 kilómetros antes de caer a 950 kilómetros del lugar de lanzamiento.
Su trayectoria sugiere que Pyongyang podría tener la tecnología para lanzar un proyectil a más de 13,000 kilómetros de distancia, lo que coloca a todas las ciudades estadounidenses a su alcance.
“La prueba confirmó que todos los sistemas de armas cumplieron satisfactoriamente con los requisitos de diseño y que son capaces de garantizar por completo la confiabilidad en situaciones de combate para cumplir su misión como sistema estratégico de armamento”, dijo el Rodong.
A decir del régimen norcoreano, el sistema de armas ICBM Hwasong-15 representa el sistema de armas propio del Partido de los Trabajadores de Corea, “que se desarrolló con esfuerzos y tecnología al 100 por ciento domésticos para adaptarse a las condiciones específicas del país”
FOTOS: Rodong Sinmun