Siete personas que fueron bloqueadas en Twitter por Donald Trump y el Instituto Knight para la Primera Enmienda de la Universidad de Columbia presentaron una demanda contra el presidente estadounidense y su equipo de comunicaciones, acusándolos de violar la Constitución estadounidense.
La demanda fue presentada ante la corte del distrito sur de Manhattan contra Trump, su portavoz, Sean Spicer, y el director de redes sociales de la Casa Blanca, Daniel Scavino bajo el argumento de que el bloqueo se da en “un importante foro público” y viola la Primera Enmienda de la Constitución, que protege entre otros la libertad de expresión y de prensa, así como el derecho de las personas a solicitar al gobierno la reparación de agravios.
La acusación sostiene que el bloqueo de los críticos del mandatario impide a estos ciudadanos leer y responder los tuits del presidente, participar en las discusiones y pedir al gobierno una reparación de agravios. También asegura que quienes no han sido bloqueados -como el Instituto Knight, uno de los demandantes- son perjudicados porque se ven forzados a participar en un foro donde los críticos han sido censurados.
“La cuenta Twitter del presidente Trump se ha convertido en una fuente importante de información y noticias sobre el gobierno, y en un foro importante de expresión de, hacia o sobre, el presidente”, dijo Jameel Jaffer, director ejecutivo del Instituto Knight, en un comunicado.
“La Primera Enmienda se aplica a este foro digital de la misma manera en que se aplica a cabildos y reuniones abiertas de los consejos escolares. La Casa Blanca actúa fuera de la ley cuando excluye a personas de este foro simplemente porque han estado en desacuerdo con el presidente”, añadió.
Entre los siete estadounidenses que acusaron a Trump ante la justicia figura Philip Cohen, un profesor de sociología de la Universidad de Maryland, la escritora y consultora política de Washington DC Rebecca Buckwalter, el policía de Texas Brandon Neely y el residente de cirugía de Tennessee Eugene Gu.
Trump cuenta con 33,7 millones de seguidores en Twitter, cuyo formato de 140 caracteres utiliza asiduamente y a toda hora del noche o del día, muchas veces de manera polémica, para comunicarse con sus simpatizantes o detractores.
—
(Con información de AFP)