EN MÉXICO hay cuentas que no tienen fin… 43, 44, 45 de Microteatro Aguascalientes, es una historia que cuenta lo que pudo haber sucedido con dos de los jóvenes que viajaban en aquel camión, en Ayotzinapa, el 27 de septiembre de 2014, antes de desaparecer. Fue una de las seleccionadas para participar en Madrid del 5 al 20 de septiembre, en la temporada Por México.
Una historia original de José Ignacio Trejo que surgió originalmente como tarea de un taller y en el proceso se volvió un trabajo reflexivo de un montaje que terminó por adaptarse a los 15 metros cuadrados del formato de microteatro.
“Se hizo con mucho amor y se nota, se nota, no hay un solo detalle que se haya dejado al azar, todo está en su lugar, cada punto y cada énfasis está yo creo con un valor artístico muy grande porque sale del corazón”, argumentó el dramaturgo conmovido al ver su trabajo traducido en escena.
El destinatario principal del texto fue Rafael Santacruz, director de 43, 44, 45 que confesó haber sentido varios tipos de miedo en el proceso al saber de la historia, al leer el texto, adecuarla al espacio, pero finalmente se dedicó a aterrizar esta historia que tiene por objeto desacralizar la imagen de los “43” y convertirlos en humanos, en jóvenes que con una familia que los espera y una vida que desde hace casi dos años quedó trunca.
“Tenía que ser un trabajo de mucha honestidad, estamos tan cercanos en este espacio que cualquier técnica de actuación que se pretenda va a ser falsa, tenemos que partir de la absoluta honestidad y ese es el reto más complicado, tratar de ser honesto cuantas veces sea necesario repetirlo”.
Para él, ser parte de la temporada Por México es al mismo tiempo un orgullo y una responsabilidad llevar esa voz para entregarla a los espectadores.