Los niveles de participación de las mujeres en la vida política y administrativa en Hidalgo no mejorarán sustancialmente tras la pasada elección, aun cuando existió la exigencia de equidad de género en la composición de las candidaturas.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en sus resultados del Programa de Asuntos de la Mujer y de Igualdad entre Mujeres y Hombres, muestra que Hidalgo está en los últimos lugares a nivel nacional, al tener un bajo índice de mujeres en cargos públicos.
Por ejemplo, en los 84 ayuntamientos, son apenas seis las presidentas municipales en funciones, circunstancia que no mejorará del todo a partir del 5 de septiembre, puesto que sólo fueron electas 16 alcaldesas, diez más, pese a las cuotas exigidas por el Instituto Estatal Electoral (IEE).
En cuanto a las mujeres que ocupan una curul en el Congreso local, de las 30 posiciones, existe sólo 27 por ciento de mujeres, es decir, nueve diputadas.
Con la llegada de la nueva legislatura la situación no se modifica de manera sustancial.
Y aun cuando las mujeres ya son mayoría en Hidalgo, al tener 51.77 por ciento entre la población la jefatura de las familias, todavía prevalecen las figuras masculina dos terceras partes más que las mujeres.
Mientras, los hombres duplican el porcentaje de las mujeres económicamente activas, según los datos que utiliza la CNDH, extraídos de los censos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística. Y en igual proporción se encuentra el número de desempleados.
La puesta en marcha de las cuotas de equidad, que significa tener un 50 por ciento de hombres y mujeres, considerado como un punto de equilibro para la representatividad, no se verá reflejado al ser nominada una mayoría de personajes políticos masculinos.
Mientras tanto, la representatividad de las mujeres en el Senado es nula, además en la Cámara baja se encuentra una representatividad baja.