Un grupo de parlamentarios italianos de derecha y
centro anunció este jueves que va a organizar un referéndum para abrogar la ley
aprobada la víspera que legaliza el matrimonio gay.
“No pudimos manifestarnos en el parlamento, ni
siquiera presentar enmiendas. Llegó el momento de salir a la calle y de
movilizar a la gente”, anunció Eugenia Roccella, del pequeño partido de
centro-derecha Idea, durante una conferencia de prensa.
Los conservadores critican la decisión del primer
ministro de centro-izquierda, Matteo Renzi, de someter la ley al voto de
confianza para acelerar el proceso tras dos años de debates en el Parlamento.
Sin embargo, los pasos para llegar a un referéndum
son complejos, ya que se necesita entre otras reunir 500 000 firmas, y luego
obtener la aprobación del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional.
Como venganza, Massimo Gandolfi, líder de los
católicos tradicionalistas amenazó al primer ministro Renzi con forzar su
renuncia como gobernante con una avalancha de votos en su contra en otro
referéndum, que tendrá lugar en octubre para aprobar la reforma constitucional
sobre el Senado y con el que se juega su mandato.
Los conservadores no
le perdonan a Renzi que siendo católico practicante sacaraadelante la ley que legaliza las uniones
homosexuales y que permitió a Italia alinearse con el resto de los grandes países de Europa.