Científicos de la Universidad de Bath, Reino
Unido, en conjunto con la Universidad Queen Mary de Londres y el Laboratorio de
Robótica de Bristol crearon una batería que transforma la orina en
electricidad.
Los creadores, Mirella Di Lorenzo y Jon Chouler,
señalaron a la BBC que su nueva
batería es alimentada por orina y genera electricidad barata. Al ser compacta, poderosa, pronostican un impacto positivo en
el mundo en desarrollo.
“Las baterías microbianas tienen un potencial real para producir bioenergía renovable de desechos como la orina”, señaló Di Lorenzo. “Hasta ahora, uno de los problemas de las
baterías microbianas es que pueden resultar muy caras de manufacturar, pues el
cátodo suele contener platino –un elemento muy costoso- para acelerar las
reacciones que generan la electricidad”, agregó.
Elaborada con tela de carbono y alambre
de titanio, para crear más potencia la nueva batería utiliza un catalizador de glucosa y ovoalbúmia, una proteína que se encuentra en la clara de huevo. Así, Di Lorenzo y Chouler han podido multiplicar la cantidad de electricidad generada con
sólo reorganizar la posición de las baterías y cambiar el
diseño.
Sin embargo, a partir de este proyecto, los investigadores pretenden crear lavabos inteligentes que
generen energía automáticamente de los desechos, aunque aún se encuentran en una
etapa temprana de investigación.
“Los retretes estarían instalados con un dispositivo que tomaría
los desechos para convertirlos directamente en energía a través del sistema de
baterías microbianas, esto no sólo mejorará el acceso a la energía sino que
también ayudará a resolver problemas sanitarios”, dijo Di Lorenzo.