Chihuahua, Chih.- Por
más de tres años, la comunidad de Cahuisori ubicada en el municipio
de Ocampo, ha solicitado la reubicación y reconstrucción de la
primaria federal Pascual Ortiz Rubio, única en la comunidad y que
según señalaron los inconformes, “ni siquiera parece escuela”
ya que tiene evidentes carencias en cuanto a infraestructura.
Aunque
se logró la autorización del proyecto por parte de ICHIFE, mismo
que debió estar listo para el presente ciclo escolar, aún no se
comienza con su construcción a causa de una serie de irregularidades
suscitadas en la misma comunidad.
Dicha
escuela es la única primaria de la comunidad y atiende a casi 100
alumnos, algunos de ellos de una comunidad que se encuentra a 15
minutos de Cahuisori; sin embargo, no tiene los salones suficientes,
ni en condiciones donde se pueda lograr el máximo aprovechamiento de
los menores, incluso indicaron los paterfamilias que ICHEA, les
prestó una de sus aulas para que pudieran trabajar. Otro de los
detalles es que la cocina funciona también como comedor, por lo que
entre sartenes y ollas los niños comen, lo que representa una
amenaza para su integridad física.
“Los
techos se gotean, hay tablarrocas que están perforadas, las láminas
están oxidadas, es una escuela donde estudiaron nuestros padres,
tiene muchos años. Apenas tenemos 4 salones y uno que nos prestó
Educación para los Adultos, fuera del cerco de la escuela. Las tazas
de los baños están quebradas, tienen moho, los tinacos están en el
piso porque no había para ponerlos en base, el mobiliario está muy
usado, sale más barato construir otra que arreglar ésta”,
indicaron los quejosos, que decidieron conservar el anonimato.
Agregaron
que por su ubicación incluso ya han atropellado a un niño en una
ocasión sin que pasara a mayores, pero aún no hay señalamientos.
Por todo lo anterior después de tres años, se logró que se
aprobara con la donación del terreno a Gobierno, se hicieron planos
y cotizaciones; sin embargo, cuando ya todo estaba listo una familia
que alega ser dueña del terreno se opuso a su construcción así
como un profesor llamado “Gabriel”. Asimismo señalaron que en
Secretaría de Educación no han atendido sus quejas y que miembros
de la comunidad fueron engañados para firmar documentos donde se
oponían a la obra. Por todo lo anterior pidieron la intervención de
las autoridades competentes para resolver esta problemática que pone
a sus hijos en riesgo y no les permite obtener una educación de
calidad.