La actriz francesa Paula Maxa jamás ganó un Óscar ni destacó
por estar en películas aclamadas por la crítica, sin embargo, ganó su lugar en la
historia del cine por haber interpretado el papel de mujer asesinada en 358 ocasiones.
Este hecho la convirtió en la actriz que más veces ha muerto
en la pantalla grande, y no fueron cualquier tipo de asesinatos, ya que la mayoría de las
veces tuvo que ‘fallecer’ de forma despiadada y brutal.
Paula, cuyo nombre real fue Marie-Thérèse Beau, cautivaba en
sus papeles por su capacidad para expresar emociones y sentimientos, tenía
gestos excesivos y los ojos más expresivos de la pantalla grande, y en aquel
tiempo del cine mudo, estos rasgos la hacían la candidata perfecta para ser
asesinada frente a la cámara.
Y si morir 358 veces en pantalla no parece suficiente, en el
teatro tiene el récord de morir en 30 mil ocasiones.
Sin embargo, sus dotes expresivos la encasillaron en el
papel de víctima, motivo por el cual Maxa decidió dejar de aceptar este tipo de
personajes, cambiando papeles de muerte por la comedia y haciendo reír a la
gente en el teatro.
Con información de hoycinema.abc.es