Para frenar el incremento en el robo de combustible de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), el gobierno del estado y la empresa productiva del Estado trabajan en estrategias para la detección de traficantes de hidrocarburos, afirmó el secretario de Gobierno, Salvador Elguero Molina.
El funcionario reconoció que es “muy complicado” vigilar los casi 3 mil kilómetros de infraestructura en tubería que traviesan la entidad, por lo que junto con la Pemex, la Secretaría de Seguridad Pública estatal, de la XVIII Zona Militar y la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR), dijo, mantiene un operativo especial de detección de tomas clandestinas.
“Estamos aplicando ya medidas que nos van a permitir una reducción en este delito, hemos apostado por las labores de inteligencia e información para poder detener a quien realiza esta actividad ilegal, pero sabemos que es muy difícil”, comentó luego de comparecer ante diputados estatales como parte de la glosa del quinto informe de gobierno.
Las zonas con mayor número de tomas clandestinas son la región Tula-Tepeji y el área metropolitana de Pachuca con Mineral de la Reforma.
Sin dar una cifra, Elguero Molina aseguró que con los operativos contra los gasotraficantes han logrado la detención de presuntos chupaductos.
El secretario aseveró que las personas aprehendidas por este delito pertenecen “a grupos delictivos locales”.