La dieta diaria de las personas debe incluir el consumo de
oleaginosas, consideradas alimentos funcionales por las propiedades
nutricionales que aportan para la adecuada actividad del organismo.
El coordinador de Nutrición de la delegación del Instituto
Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Sonora, Fredy Nava Raygoza, subrayó que
consumo de oleaginosas como cacahuates, pistaches, nueces, semillas de girasol
y almendras, previenen enfermedades.
Los padecimientos que previenen, mencionó, son
cardiovasculares, gastrointestinales y respiratorios, puesto que los productos
oleaginosos fortalecen el sistema inmunológico.
Las oleaginosas también son fuente de energía porque
contienen aceite vegetal, calcio, fósforo, zinc, ácidos grasos omega 3 y 6,
vitaminas A, D, E y K, además sus componentes reducen el riesgo de padecimientos
cardiacos, anotó.
Destacó el especialista en nutrición que, sin embargo, no se
debe abusar en su consumo porque podrían provocar un aumento en el peso
corporal de las personas.
Nava Raygoza refirió que lo recomendable es comer entre
cinco y diez semillas por día e ingerirlas sin que estén adicionadas con azúcar
o sal, ya que por sí sola la oleaginosa mejora la digestión y ayuda a que el
cuerpo no absorba azúcares y grasas de alimentos.
Los beneficios que aportan a la salud son la disminución de
la absorción de glucosa en la sangre por la fibra que contienen, por lo tanto,
su consumo es favorable para las personas enfermas de diabetes, ya que también
incentiva su funcionamiento neuronal.
“Los componentes de ciertas oleaginosas ayudan a regenerar
la piel y fortalecen los huesos por su alto contenido en calcio, por lo que
también es aconsejable que lo consuman pacientes con osteoporosis y mujeres
embarazadas”, puntualizó.