Durante nueve largos años, científicos de la NASA, la Universidad Johns Hopkins y el Instituto de Investigaciones Northwest estuvieron esperando a que New Horizons, sonda espacial del tamaño de un piano, pasara por Plutón. Cuando al fin llegó a su destino, el mes pasado, la nave comenzó a enviar a la Tierra fotografías del planeta enano desde miles de millones de kilómetros de distancia. Las impactantes imágenes cautivaron a la comunidad científica, revelando montañas de hielo, tundras congeladas y detalles nunca vistos de la superficie plutoniana. Impactantes, por supuesto, si los científicos estuvieran diciendo la verdad.
Sucede que hay un pequeño, pero alborotador grupo de proponentes de teorías de conspiración —blogueros que se hacen llamar “Pluto Truthers” (Desmentidores de Plutón)— que aseguran que las recientes fotografías son falsas. De hecho, argumentan que New Horizons no es otra cosa que la más reciente misión galáctica ficticia para engañar al público, posiblemente ideada para desviar fondos fiscales hacia proyectos gubernamentales más secretos o perversos. Afirman, incluso, que semejante truco no es novedad, pues se remonta a la época del primer alunizaje.
Los acercamientos iniciales de Plutón llegaron a la Tierra días antes del sobrevuelo, lo que instó a un hombre de San Diego —el usuario de YouTube llamado Crrow777— a publicar un video donde explica por qué cree que las imágenes son falsas. Dijo que usó una cámara telescópica para tomar fotografías de Júpiter a 779 millones de kilómetros de distancia, y que la calidad de sus imágenes era superior a las fotos de la NASA de Plutón, tomadas a una distancia de apenas unos pocos millones de kilómetros.
“No son más que ridiculeces y patrañas. Están robando al pueblo estadounidense y, encima, lo engañan”, dice en el video, y añade que la sonda espacial “probablemente está estacionada en algún estudio de sonido de Burbank, Hollywood”. Concluye diciendo: “Si quieren ver al verdadero Plutón, lamento decirles que tendrán que ir a Disneylandia” [en referencia al perro de Mickey Mouse, Pluto, nombre en inglés del planeta enano].
El corto de siete minutos y medio ha sido visto más de noventa mil veces (su canal, que también incluye vídeos del aterrizaje en el cometa Rosetta, el año pasado, así como del paso de ovnis por la superficie lunar, ha recibido más de 4.8 millones de visitas y cuenta con 43 000 suscriptores). Como seguimiento del video de Plutón, Crrow777 utilizó Photoshop para invertir los colores y mejorar los niveles de la imagen de la NASA de Plutón a fin de mostrar lo que denomina una “imagen fantasma” de “artefactos” alrededor del planeta enano. En comparación, su fotografía de la luna no contiene artefactos.
“Es una imagen construida. Nada más”, agrega, acerca de la fotografía de la NASA. “No hay ninguna sonda en el espacio. Lo único que sabemos de Plutón es que hay muy poca luz en su cielo. Es todo.”
Crrow777 no es el único que describe la reciente noticia como un artificio. Kedrick Blessed (nombre real), ingeniero computacional californiano de treinta años, informa que siempre quiso ser astronauta, hasta que dejó de creer que la NASA contaba con la tecnología para llegar al espacio. “Cualquiera puede meterse en una computadora y crearlas”, dice acerca de las imágenes de Plutón. “No hay líneas de radiación… Ninguna estrella.” La NASA afirma que emprende misiones como New Horizons, prosigue, pero sólo para incrementar la popularidad de la agencia.
Justin Shaw, de Lethbridge, Alberta, no tiene la menor duda de que las imágenes del sobrevuelo fueron generadas por computadora. “Toda la misión es una falsedad. No tiene la menor autenticidad”, asegura. “Ni siquiera la diseñaron bien”. Agrega que “desconozco el motivo para simular la misión, excepto engañar. Hay mucho dinero fiscal que desaparece por quién sabe qué razones”.
Como otros Desmentidores de Plutón —término que le desagrada—, Shaw desconfía de todo el programa espacial. Según su teoría: si el espacio es un vacío, ¿cómo es posible que una nave pueda cruzarlo? Y si no es un vacío, es probable que esté repleto de escombros y entonces, ¿por qué los gobiernos gastarían montones de dinero enviando gente y equipos de alta tecnología a semejantes zonas de peligro? Pero antes de poder reflexionar en esas interrogantes, añade Shaw, tienen que reconsiderar hasta las enseñanzas básicas, como que la Tierra es esférica y está rotando. “Estoy harto de sus embustes y engaños”, concluye.
Luego tenemos al grupo Truther Truthers (Desmentidor de los Desmentidores). Richard Hoagland, exconsultor de la NASA y coautor del éxito en 2007 del New York Times, Dark Mission: The Secret History of NASA, opina que individuos como Crrow777 son “topos” contratados por la agencia para evitar que el público analice con detalle las imágenes de Plutón y vea lo que revelan en realidad: evidencias de vida alienígena. Dice que el movimiento Desmentidores de Plutón es “como una contrafuerza política creada para confundir a la gente… para hacer que quienes miran y toman en serio las imágenes, pasen por alto lo que hay en ellas”.
Hoagland, a quien un escéptico del espacio llama “el abuelito de todo este asunto de los ‘Desmentidores’”, cree que las imágenes de la NASA de Plutón, Marte y la Luna revelan patrones geométricos que, de hecho, muestran las ruinas de civilizaciones extraterrestres. La única razón de que el público no haya enloquecido con las evidencias, prosigue, es que el gobierno todavía no ha dado la noticia. Como prueba, señala un documento de 1960 comisionado por la NASA y conocido como el Informe Brookings, el cual recomienda que la agencia oculte al público toda información sobre vida alienígena para evitar que cunda el pánico.
“Les aterra que la trama social pueda colapsar”, afirma Hoagland. A la larga, cuando nos considere preparados, la NASA señalará lo que muestran, realmente, las imágenes de Plutón. “Esas no son montañas. Esos no son cráteres. Son estructuras geométricas artificiales producidas por antiguas civilizaciones que se encuentran en un estado de conservación asombroso.”
El Congreso de Estados Unidos fundó la NASA en 1958, y muy pronto surgió la desconfianza en la agencia (algunas personas bromean con que las siglas en inglés significan: Never A Straight Answer [nunca una respuesta clara]). Las teorías de conspiración son incontables y abarcan desde que todos los astronautas son actores y la humanidad nunca ha viajado al espacio hasta afirmaciones de avistamientos de ovnis y encubrimientos gubernamentales. Según una encuesta de Gallup de 1999, 6 por ciento de los estadounidenses cree que el gobierno hizo un montaje para el alunizaje Apollo (“Un pequeño paso para un hombre…”), tal vez para contribuir a que Estados Unidos ganara la Guerra Fría. Otros opinan que Stanley Kubrick dirigió el “paso gigante” de Neil Armstrong en un estudio cinematográfico (Habitación 237,celebrado documental de 2012, sugiere que la película El resplandor, de Kubrick, está plagada de pistas sobre este encubrimiento). Vídeos de conspiraciones sobre los exploradores Mars Pathfinder y Mars Curiosity —vehículos robóticos que, según la NASA, llegaron a la superficie de Marte en 1997 y 2012, respectivamente— han recibido millones de visitas en YouTube.
Con todo, los escépticos siguen siendo minoría. Según el Centro de Investigaciones Pew, 73 por ciento de los estadounidenses tenía una buena opinión de la NASA en 2013 (Pew agrega que hoy sólo 22 por ciento tiene la misma opinión del Congreso). Para 2014, casi un cuarto de la población de Estados Unidos consideraba que el gobierno gastaba muy poco en exploración espacial, la proporción más alta de cualquier año desde que la Encuesta Social General formulara la pregunta, por primera vez, en 1973.
Tal vez por eso los Desmentidores de Plutón son tan criticados. Crrow777 dice que se ha convertido en blanco de ataques, y por ello pidió a Newsweek que no publicara su nombre verdadero. “Mucha gente se sorprendería de saber cuánta ira y odio reciben algunas personas sólo por hacer videos que presentan un punto de vista distinto”, comenta. Le ha “impresionado el grado de malignidad. Algunos han dicho que viven en mi área y van a buscarme… Todo por causa de los cortos de video.”
En 2013, en una entrevista con el sitio web Salon, Stephan Lewandowsky —científico cognitivo de la Universidad de Bristol, Inglaterra, y autor de un artículo sobre “ideaciones de conspiración” publicado en Psychological Science—,dijo que ciertos individuos creen en esas teorías porque “dan una sensación de control” sobre “la aleatoriedad”. En su investigación, Lewandowsky descubrió que las teorías de conspiración no suelen desarrollarse en condiciones de aislamiento —por ejemplo, una persona que duda del alunizaje también podría creer que el FBI mató a Martin Luther King Jr.—, y que las teorías pueden influir incluso en las personas que no creen en ellas. Como él y sus coautores señalan en el artículo, “la caída de la tasa de vacunación está vinculada con la diseminación de teorías de conspiración sobre los presuntos riesgos de las vacunas”.
Lewandowsky también hace notar por qué es difícil razonar con los teóricos de conspiraciones: afirman que cualquier evidencia contraria a la suya sólo demuestra que existe una conspiración. Es lo que los psicólogos llaman “la naturaleza autocurativa del razonamiento”. Razón por la que, posiblemente, pese a estar superados en número de manera abrumadora, los Desmentidores de Plutón sienten que están ganando impulso.
“Vivimos en una era de poder y engaño”, afirma Crrow777. “Puedo ver la diferencia en la cantidad de personas que empiezan a percatarse de ello. Y, de hecho, está ocurriendo un despertar en este sentido.”
Los científicos no parecen interesados en dicho despertar. Representantes de la misión New Horizons y tres astrofísicos independientes se negaron a hablar con los Desmentidores de Plutón. Jonathan McDowell, astrofísico del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsoniano, dice: “Es difícil responder en detalle a declaraciones que no tienen sentido”.
“Es un minúsculo grupo de individuos marginales de quien nadie habría oído hablar si no fuera por internet”, interpone Phil Plait, astrónomo que ha trabajado con la NASA y director de Bad Astronomy, sitio web dedicado a desacreditar interpretaciones erróneas sobre el espacio. “Sin duda hay igual cantidad de personas que creen que los gatos no existen.”
Por supuesto, es posible que estas respuestas también sean parte de otro encubrimiento.
Publicado en cooperación con Newsweek/ Published in cooperation with Newsweek.