El FBI ha comenzado a investigar las configuraciones de seguridad del correo electrónico probado de Hillary Rodham Clinton. Hasta ahora las oficinas del FBI han contactado a una firma de tecnología de Denver, la cual ayudó a manejar el sistema que utilizaba la ahora candidata presidencial.
La semana pasada el FBI contactó al abogado de Hillary, David Kendall, para preguntar sobre un sistema de seguridad a base de huellas digitales en el que hay copias de todos los correos que Clinton envió durante su tiempo como secretaria de estado.
La investigación del FBI empieza después de que el inspector de inteligencia denunciara el caso al Departamento de Justicia estadounidense en Julio. Los oficiales de Inteligencia mostraron preocupación de que información que no está bajo su control pudiera ser comprometida.
La principal preocupación del gobierno estadounidense es toda la información clasificada o comprometedora que pudieron haber pasado por el correo de Clinton sin pasar por los protocolos necesarios.
Ni la denuncia, ni el FBI han hablado de que Clinton haya hecho algo malo, incluso oficiales del FBI declararon que la investigación no es en contra de la candidata.
Estas investigaciones sacan a la luz nueva información sobre el sistema de seguridad de Hillary Clinton y los esfuerzos que hizo para mantener un canal de comunicación privado.
La candidata presidencial ha llamado al Departamento de Estado para que revele el contenido de todos sus corres al publico para evitar especulaciones, sin embargo el departamento no lo ha hecho.
La controversia comenzó en el verano de 2014 cuando el Departamento de Estado se dio cuenta de que no podía acceder a algunos correos de la ex Secretaria de Estado.
En octubre de 2014 el Departamento de Estado pidió a Clinton la información y ella entregó 55 mil páginas de correos. Después declaró que eliminó todos los otros correos que había recibido como Secretaria de Estado, indicando que los correos eliminados eran personales y no tenían nada que ver con su trabajo.
Las investigación del FBI en relación con los correos de Hilary Clinton continúan, mientras la candidata hace todo lo posible porque el escándalo no afecte su campaña presidencial.
(Con información de agencias)