Diez personas murieron este viernes luego que un comando armado abrió fuego a plena luz del día contra una centro distribuidor de cerveza a las afueras de Monterrey, un caso que según las autoridades estaría vinculado al crimen organizado.
La tarde del viernes, varios sicarios a bordo de dos camionetas arribaron a la cervecería, que se ubica a 200 metros del palacio municipal de García y a unos 25 kilómetros de Monterrey, la tercera ciudad más importante del país.
“Dentro de las pocas horas que tenemos de investigación sobre la escena del crimen dentro de los hallazgos están un arma calibre 223, una caja de balas (calibre) 45 y alrededor de seis kilos y medio de droga, mariguana en concreto”, señaló.
Subrayó que también “se encuentra una báscula, por lo cual la línea de investigación primordial que tenemos es un ataque entre bandas del crimen organizado“.
Flores Saldívar aclaró que tal vez no todas las personas acribilladas pertenecen a los grupos delictivos, ya que algunos de ellos al parecer trabajan como empleados en la agencia de venta de cerveza.
Hasta el momento no se han dado a conocer los nombres de los occisos, en tanto los peritos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) llegaron al sitio de la agresión para efectuar las indagatorias.
La agresión se registró alrededor de las 14:30 horas, en el negocio ubicado en las avenidas Sor Juana Inés de la Cruz y Heberto Castillo, en la colonia Mirador de García, en la cabecera municipal.
Paramédicos de las cruces Roja y Verde acudieron para atender a los lesionados, en tanto que elementos de la Policía Ministerial, Fuerza Civil y Ejército Mexicano acordonaron la zona para instalar un dispositivo de seguridad.
Personal del Servicio Médico Forense (Semefo) acudió al sitio del ataque para recoger los cuerpos de los occisos y los trasladó al Anfiteatro del Hospital Universitario para practicarles la autopsia de ley.
Al llegar al lugar de los hechos, las autoridades hallaron en una bodega siete kilos de marihuana y siete cadáveres desnudos o semidesnudos, añadió Flores.
Otras tres personas que resultaron heridas fueron enviadas de urgencia a un hospital cercano, donde fallecieron poco después.
Una fuente de la fiscalía local dijo que los agresores se llevaron un botín de 10.000 pesos (unos 650 dólares), mientras que algunos testigos aseguran que huyeron rumbo a Monterrey.
En un principio, un agente de la policía local dijo a la AFP que el establecimiento fungía como bar, pero Flores corrigió al asegurar que se trata de un centro de depósito y distribución de cerveza, donde se desplegó un importante operativo de policías y militares.
Territorio “Zeta”
En el municipio de García (de unos 145.000 habitantes) reside Jaime Rodríguez “El Bronco”, quien hizo historia en las elecciones intermedias del pasado 7 de junio al ser electo gobernador de Nuevo León, el primer candidato independiente en ganar un cargo de esta envergadura en México.
Con el crimen de este viernes “mi tristeza crece y mi coraje aumenta. Qué impotencia de no tener el poder para actuar rápido”, escribió Rodríguez en su página Facebook, quien hace unos días en entrevista para Newsweek en Españolconfesó que “siempre quiso ser campesino que llega a salvar una ciudad”.
“El Bronco”, un político de 57 años conocido por su estilo ranchero, asegura haber sobrevivido a dos atentados durante su mandato como alcalde de García (2009-2012), durante el cual desafió al sanguinario cártel Los Zetas.
Una fuente de la Agencia Estatal de Investigaciones que pidió el anonimato aseguró que la cervecería, donde las autoridades hallaron un arma larga y cargadores de diversos calibres, fungía como un centro de operación de personas que pertenecieron al Los Zetas.
Esta organización, fundada por militares de élite desertores, mantiene actualmente la hegemonía en este estratégico estado fronterizo con Estado Unidos. Su líder Omar Treviño, alias “Z-42,” fue capturado en marzo en San Pedro Garza García, un exclusivo suburbio de Monterrey.
A Treviño se le atribuye el incendio de un casino de Monterrey en 2010 en el que murieron 52 personas y la matanza de 72 migrantes de Centro y Suramérica ese mismo año en el vecino estado de Tamaulipas.
Los Zetas eran el brazo armado del cártel del Golfo hasta que se escindieron en 2010 entre mortíferos enfrentamientos.
Este tipo de pugnas intestinas y la lucha militarizada que el gobierno emprendió contra el narcotráfico y el crimen organizado en 2006 han dejado desde entonces más de 80 000 muertos y 22 000 desaparecidos en México, según las cifras oficiales.
(Con información de AFP y Notimex)