Internos del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Ixmiquilpan negaron acciones de corrupción y maltrato físico en su interior, como se ha mencionado en las últimas semanas entre diferentes sectores de la población.
Mediante un comunicado firmado por los reclusos, estos dilucidaron varios puntos respecto a la penitenciaria y su personal.
En este sentido, sostuvieron que no son objeto de malos tratos o acciones de corrupción.
Además explicaron que tienen un trato digno, cuentan con espacios limpios, así como con varios servicios y talleres que les permiten “ser personas de provecho” para desarrollarse e integrarse nuevamente a la sociedad.
En el documento, pormenorizan que al interior del Cereso no les cobran cuotas por sostener audiencia con la directora, Alba Nidya García, aunque reconocieron que éstas sí ha disminuido debido a que se han “priorizado” lo temas que abordan.
Los internos también mencionaron que no pagan recursos por permisos especiales, pues estos son ganados debido al comportamiento y trabajo que llevan a cabo al interior del penal, el cual es valorado por los directivos y supervisores.
Es la primera vez que los reos efectúan un escrito de inconformidad, pues señalan que la mala imagen que se genera contra el penal también los afectará en el momento que cumplan su condena y salgan a integrarse a la sociedad.