Los propietarios de impresoras en 3-D ya
pueden hacer sus propias armas de fuego imposibles de rastrear, así que ¿por
qué no añadir algunas herramientas para el allanamiento ilegal? Algunos
fanáticos de las cerraduras están utilizando software personalizado en
3-D para imprimir llaves de plástico que pueden abrir cerraduras estándar e
incluso de alta seguridad. Dos estudiantes del MIT han desarrollado un software,
Photobump, que les permite pedir una “bump key” (llave modificada para abrir
cerraduras) a cualquier proveedor en línea de impresión 3-D; lo único que
tienen que hacer es subir la foto del ojo de una cerradura.
Un cerrajero diseña y corta una “bump key”
de manera que toque todas las clavijas de una cerradura. Una vez que se inserta
la llave en la cerradura, el cerrajero la golpea suavemente con un mazo. Las
vibraciones resultantes hacen que las clavijas salten hasta alinearse con los
patrones de la llave. Es una herramienta bastante eficaz para abrir cerraduras;
incluso es posible abrir muchas cerraduras que se venden como “a prueba de
‘bump keys’”.
El año pasado, los estudiantes demostraron su
software
en una conferencia enviando su solicitud de una llave a un servicio de
impresión en 3-D. La empresa cumplió, pero después dijo que si los estudiantes
hubieran “revelado sus intenciones”, la empresa no habría impreso la llave.
Además, instituyó una política según la cual no se imprimirá nada que constituya
un riesgo para la seguridad.
Pero cualquier persona con el dispositivo
adecuado y buenas habilidades de softwarepuede hacer una “bump key”,
dice Jos Weyers, un cerrajero campeón, y vicepresidente de la Organización
Abierta de Cerrajeros (ToooL, por sus siglas en inglés). “Una persona con
conocimientos técnicos promedio podría escribir el software necesario con
bastante facilidad. Una cerradura normal que puede adquirirse en Home Depot sería
bastante fácil de abrir.”
Las impresoras de alta calidad ya pueden
producir copias de las llaves estándar del hogar. Y conforme mejoran las
impresoras 3-D domésticas, es solo una cuestión de tiempo antes de que
cualquier persona con una impresora 3-D doméstica de alta calidad sea capaz de
imprimir una “bump key” de alta seguridad.
Dado que en Estados Unidos solo unas cuantas
marcas de cerraduras dominan el mercado doméstico (en comparación con Europa,
donde hay cientos), las cerraduras estadounidenses son especialmente
vulnerables a los ladrones con “bump keys”. Weyers señala que “en Estados
Unidos, si un ladrón tiene una ‘bump key’ para las cerraduras Schlage y otra
para las Kwikset, podría adueñarse de más de la mitad de la ciudad”.
Aunque David Lawrence, uno de los
estudiantes del MIT, ha publicado en línea las especificaciones de cómo
imprimir llaves en 3-D, el otro, Eric Van Albert, espera que sus demostraciones
fomenten un mayor uso de las cerraduras digitales sin llave.