La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, dio un paso contundente en el caso del ex fiscal Alberto Nisman, al ser desestimadas las pruebas presentadas por el fallecido fiscal contra la mandataria sudamericana.
El juez argentino Daniel Rafecas rechazó la denuncia presentada por el fallecido fiscal Alberto Nisman contra la presidenta Cristina Kirchner por presuntamente encubrir a exgobernantes iraníes por un atentado antisemita en 1994, informaron fuentes judiciales.
“Resuelvo desestimar la denuncia por inexistencia del delito”, dice el dictamen de 63 páginas del juez al rechazar así la imputación a la Presidenta presentada por el fiscal Gerardo Pollicita, a partir de la presentación de Nisman.
Cuatro días antes de morir con un disparo en la cabeza en su departamento, Nisman acusó a Kirchner, su canciller Héctor Timerman y allegados del gobierno de haber encubierto a los acusados iraníes por el atentado a la AMIA. La muerte de Nisman ocurrió el 18 de enero, la víspera de explicar su denuncia a una comisión del Congreso.
“Para Rafecas, los elementos acompañados al momento de la presentación de la denuncia inhiben el inicio de un proceso penal”, informó la resolución Centro de información Judicial, dependiente de la Corte Suprema argentina.
El expresidente iraní Ali Rafsanjani es uno de los sospechosos del ataque a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), con un saldo de 85 muertos y 300 heridos.
El juez enfatizó que no están dadas las mínimas condiciones para iniciar una investigación penal a partir de lo presentado por Pollicitas.
Tras analizar “toda la evidencia ha quedado claro que ninguna de las dos hipótesis de delito sostenida por el Fiscal Pollicita en su requerimiento, se sostienen mínimamente, la primera (“Comisión de la Verdad”), porque el presunto delito nunca se cometió”.
Respecto a los supuestos pedidos del gobierno para evitar las órdenes de Interpol contra sospechosos iraníes, Rafecas indicó que “la evidencia reunida, lejos de sostener mínimamente la versión fiscal, la desmiente de un modo rotundo y lapidario, llevando también a la misma conclusión de la inexistencia de un delito”.
La denuncia Nisman-Pollicita acusó a Kirchner de pedir a Interpol que levantase los pedidos de captura contra los iraníes, pero el exsecretario general del organismo policial Ronald Noble lo desmintió.
Nisman escribió que Kirchner buscaba conseguir petróleo de Irán a cambio de encubrir a los iraníes, aunque el crudo que exporta Teherán no es compatible con el procesado en Argentina.
Un juez respetado.
La muerte de Nisman y la acusación a la presidenta sacudieron el clima político a ocho meses de las elecciones presidenciales.
El caso dividió al país entre quienes piensan que Nisman fue una víctima del gobierno y los que denuncian un complot internacional para desacreditar a Kirchner impulsado por poderosos exagentes de los servicios de inteligencia echados de sus puestos el 17 de diciembre pasado.
“Es un juez respetado, idóneo, de solidez profesional”, opinó Luis María Cabral, expresidente de la Asociación de Magistrados al conocer su designación en enero pasado en medio de la conmoción nacional por la muerte de Nisman en circunstancias que aún son investigadas por la fiscalía.
Rafecas juzgó a militares de la dictadura (1976-83) por delitos de lesa humanidad y fue distinguido por sus estudios sobre la Shoá que perpetraron los nazis, con los premios Derechos Humanos de la Fundación B’nai B’rith, Moisés 2011 de la Sociedad Hebraica Argentina y Gilbert Lewi de la Fundación Museo del Holocausto de Buenos Aires.
El dictamen del juez de este jueves sostuvo que la documentación que acompaña la denuncia “inhiben el inicio de un proceso penal por cuanto no sólo dejan huérfano de cualquier sustento típico al hecho descripto como una supuesta maniobra de ‘encubrimiento'”, destinada a dotar de impunidad a los acusados iraníes.
“Todas las supuestas tratativas y negociaciones que la denuncia le adjudica a personas que no integran organismos públicos, reflejadas en las escuchas telefónicas aportadas, quedan en el mejor de los casos circunscritas a la antesala de de hipótesis delictivas”, escribió el magistrado.
Las escuchas aportadas por Nisman y avaladas por Pollicita son conversaciones entre un dirigente barrial kirchnerista y un ciudadano argentino sin jerarquía ni relevancia vinculado a la comunidad musulmana.
(Con información de AFP)