En los últimos tiempos, mucha gente ha tenido el temor comprensible de que podríamos estar próximos a otra guerra mundial. Y si bien hemos tenido más de 95 guerras en los últimos 200 años, la realidad es que nuestra belicosidad ha disminuido desde la Segunda Guerra Mundial. Sin contar los conflictos librados por poderes (como en Corea y Vietnam), la paz entre las principales superpotencias geopolíticas ha sido inusitadamente prolongada.
Pero ¿persistirá esa paz? Eso es lo que pretendía averiguar -con matemáticas- el investigador Aaron Clauset, de la Universidad de Colorado. Clauset hizo un análisis estadístico de 200 años de datos sobre la guerra, y llegó a la conclusión de que una batalla de la envergadura de la Segunda Guerra Mundial podría volver a ocurrir; muy pronto. Su análisis fue publicado el 21 de febrero en la revista Science Advances. Clauset habló de sus resultados con Newsweek.
La entrevista ha sido editada y condensada.
¿Cómo compara la Segunda Guerra Mundial con otras guerras incluidas en su estudio?
La Segunda Guerra Mundial no fue un caso excepcional respecto del registro histórico.
¿Cuál es la importancia de ese hallazgo?
Es factible que todas estas guerras sean producto de una dinámica geopolítica global. Esto significa que, si analizamos los próximos 100 años, podemos calcular la [probabilidad] de tener un conflicto igual de grande o mayor. Por supuesto, esto es meramente un cálculo matemático. No se trata de una predicción. No afirmo que vaya a suceder.
¿Tienes idea de cuál sería la naturaleza de esa guerra?
Las matemáticas no toman en cuenta quién podría intervenir en el conflicto, qué lo desataría, el tipo de armas que se usarían, o en qué parte del mundo ocurriría. No indican, por ejemplo, si Estados Unidos se verá involucrado.
Y tampoco hay garantías de que el futuro será igual que el pasado. Se han identificado mecanismos que, presuntamente, reducen el riesgo de guerra; si de verdad tienen algún impacto, entonces el riesgo de una gran guerra podría ser menor de lo que predice el modelo estadístico.
¿Por qué llegas a la conclusión de que, en los próximos 1,300 años, podría estallar una guerra que matará a más de mil millones de personas?
La tasa de riesgo [la probabilidad de que ocurra algo] de una guerra que acabe con una civilización es muy reducida durante la vida de un individuo. Sin embargo, en términos de la vida de una civilización, es muy elevada. Mil años tal vez sean poco tiempo para una civilización tecnológica y longeva.
I wonder what Pinker will have to say about this
— Douglas Guilbeault (@DzGuilbeault) 22 de febrero de 2018
¿Acaso la época en que vivimos no es diferente de la era en que ocurrió la Segunda Guerra Mundial? Y de ser así, ¿eso no cambia la probabilidad de una gran guerra como aquella?
Con base en los datos, la conclusión es que no podemos saber si las cosas han cambiado. Los datos no nos permiten afirmar que el periodo de la posguerra es distinto del periodo que precedió a la Segunda Guerra Mundial.
Pero, si hemos tenido esta paz duradera, ¿acaso no significa que nos hemos vuelto una sociedad menos violenta?
Existe un debate más amplio en el que encaja este artículo. Un lado defiende el concepto del liberalismo, la idea de que las cosas están mejorando y se han vuelto más pacíficas. El proponente más vocal de este bando es Steven Pinker [autor y científico cognitivo de la Universidad de Harvard].
Los proponentes del liberalismo apuntan a procesos específicos que, sabemos, han reducido el riesgo de la guerra; cosas como la diseminación de la democracia, las alianzas en tiempos de paz, los crecientes lazos económicos y demás. El otro frente es el bando realista, el cual argumenta que la tasa de riesgo de guerra no cambia con el tiempo.
¿Cuál es tu visión de lo que nos depara el futuro?
En realidad, me considero un optimista. Deseo que las ideas del liberalismo tengan éxito. Y, ciertamente, espero que, como sociedad global, nos estemos volviendo más pacíficos y estemos trabajando en nuevas estrategias para resolver conflictos, en vez de limitarnos a usar las armas. Con todo, no estoy dispuesto a ignorar la evidencia estadística, la cual sugiere que, tal vez, la historia es más complicada.
De hecho, @sapinker vio una versión inicial hace unos 6 meses, y su retroalimentación fue útil y razonada. Para ser claros, un incremento per cápita del riesgo de morir en una guerra puede ser completamente consistente con mi hallazgo de tamaños y frecuencia estacionarios de guerra.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation whit Newsweek